El beige y los colores tierra o tostados aportan calma y tranquilidad, y sirven para “relajar” las estancias de las casas. Esto es así porque los tonos neutros o crudos ayudan a que nos sintamos más calmados y transmiten sensación de calidez y seguridad, de descanso. El beige es un color suave y orgánico que aporta sosiego y tranquilidad a las viviendas, por lo que resulta muy indicado en decoración si lo que buscamos es crear un ambiente relajado. Una estancia en tonos beige ayudará a que desconectemos del estrés y las preocupaciones del día a día y a que nos sintamos mucho más predispuestos al sosiego y al descanso.

Una de las ventajas que tiene usar el beige para decorar una estancia es que resulta un color discreto y atemporal, calmado, nada estridente. Éste es el motivo por el que nunca pasa de moda; no nos cansaremos de él por mucho tiempo que nos acompañe en casa. Por ejemplo, unas paredes pintadas de beige o unos muebles de color beige ayudan a que una estancia baje de revoluciones y crean una sensación acogedora que resulta muy beneficiosa para conseguir ese calor de hogar tan anhelado por los habitantes de cualquier casa. Y es que una casa en la que destaca el color beige se percibe más equilibrada por parte del ojo humano, por eso transmite una sensación de confort y seguridad que nos hace sentir más cómodos y protegidos. La última vez que visitamos nuestra sección Toma Nota y Decora fue para hablar del lujo silencioso; hoy lo hacemos para saber qué sensaciones transmite el color beige en la decoración de una casa.

UN COLOR IDEAL PARA EL DORMITORIO
¿Podemos decir que el color en de una vivienda guarda cierta relación con la psicología? Algunos estudios así lo indican, pues dicen que tanto el color de la ropa que llevamos como el de la vivienda donde residimos influyen en la forma en la que nos percibe el resto de personas. De hecho, se cree que en interiorismo los colores son determinantes para transmitir sensaciones; hay quien piensa que los colores son un reflejo de nuestra personalidad, y que en una casa se puede intuir la forma de ser de su propietario a partir de los colores que la decoran. Lo que está demostrado es que en una vivienda el beige se asocia a la quietud, a la estabilidad, por lo que decantarse por este color siempre será un acierto. Por lo general, elegir tonos cálidos y neutros como el beige ayudará a que la percepción emocional de quien visita la casa se acerque al relax, al descanso, a la calma y al buen humor. Por este motivo, si lo que queremos es transmitir serenidad en nuestra vivienda, elegir el color beige es una opción muy recomendable, sobre todo en estancias como dormitorios, donde debe primar el descanso y el desahogo por encima de cualquier cosa.

BEIGE EN BAÑOS Y COCINAS
Si tenemos miedo de que nuestra cocina pueda llegar a cansarnos, elegir el color el beige para la encimera o el mobiliario es una magnífica opción, pues como hemos dicho es un color que raramente aburre, al ser discreto y nada agresivo. Si se quiere, puede combinarse con otros colores más llamativos para dar un toque diferente (por ejemplo, siguiendo en la cocina, con un frutero o un elemento de almacenaje que sea de otro color).

¿Qué colores combinan bien con el beige? El blanco, el verde o el negro son muy buenas opciones. Por otra parte, el baño también es una estancia que debe invitar al relax, por lo que utilizar el beige para decorarlo siempre será un acierto.

Una cerámica elegante en un tono beige funciona muy bien en un baño; además, si el baño no es excesivamente grande el beige nos ayudará, pues es un color que refleja mucho la luz y transmite sensación de amplitud.