Cada vez es más habitual la compra de vivienda de lujo en Madrid por parte del inversor de alto poder adquisitivo. Si ya es una realidad indiscutible que la vivienda de lujo atraviesa por un gran momento en nuestro país, los datos también son elocuentes cuando se refieren sólo a la capital. Madrid es la ciudad española donde más operaciones de vivienda de lujo se realizan: un 45% de los inmuebles de lujo que se venden en España se concretan en la capital. Precisamente hace unas semanas comentábamos que Madrid es el destino preferido de los inversores latinos que buscan vivienda de lujo en España. Ya dijimos entonces que las excelentes conexiones que hay en la capital, con multitud de vuelos diarios a países como Venezuela, México, Argentina o Colombia, resulta un factor determinante para que muchos de estos inversores se decidan por Madrid. Al perfil latinoamericano hay que sumar el perfil nacional o el de otras zonas como Asia y Oriente Medio. Una circunstancia bastante significativa es que actualmente existe una amplia oferta de viviendas de alto nivel en Madrid para el alquiler, algo que no ocurre en la misma medida con la compra. Esto sucede porque inversores con un gran capital deciden adquirir este tipo de producto para rentabilizarlo después a través del alquiler, o lo que es lo mismo, utilizarlo como una forma de inversión.

¿QUÉ BUSCA EL INVERSOR DE VIVIENDA TOP?

Parece claro que el inversor de vivienda de alto standing se fija en la ubicación del inmueble antes que en la construcción. Una propiedad top situada en una zona céntrica de la capital (nos referimos a barrios como Chamberí, Salamanca, Justicia, Retiro o Sol) es el principal reclamo para los inversores de este tipo de vivienda, pues en estas zonas la demanda es altísima y no parece complicado rentabilizar la inversión en un plazo razonablemente corto. Por otro lado, el inversor de este tipo de producto considera que comprar en Madrid supone una operación segura (no olvidemos que algunos de estos inversores vienen de países actualmente con una gran inestabilidad, como es el caso de Venezuela, y deciden invertir fuera precisamente porque no quieren poner en riesgo su capital). En muchos casos este tipo de inversores buscan diferenciarse ofreciendo un valor añadido a su producto. Para ello deciden habilitar espacios exclusivos dentro de la casa, como gimnasios, una zona de spa y masaje o lujosas piscinas en las azoteas, por lo que suele ser habitual que inviertan en una reforma para acondicionar el inmueble al tipo de propiedad que ellos quieren rentabilizar después.

VIGILANDO LA EUFORIA

A pesar de este buen momento que vive la vivienda de alto standing en nuestro país, conviene ser precavidos. En la retina de todos está el estallido de la burbuja inmobiliaria que colapsó nuestro sistema inmobiliario hace una década, si bien entonces la venta de viviendas exclusivas no sufrió los efectos de la crisis en la misma medida que la venta del resto de viviendas. Por ello los expertos insisten en que el sector del lujo no debe descuidarse; tendrá que esforzarse para ofrecer siempre un producto de la máxima calidad y con un emplazamiento de primer nivel que justifique su precio de mercado.