Beti Jai: una joya arquitectónica rehabilitada

Beti Jai: una joya arquitectónica rehabilitada

El Beti Jai es un frontón de pelota vasca con más de 125 años de antigüedad que puede considerarse una pequeña joya arquitectónica de Madrid. De hecho, algunos se refieren a él como el secreto mejor guardado del barrio de Chamberí, pues no todo el mundo conoce este singular espacio, que destaca tanto por su belleza arquitectónica como por ser un lugar único en la capital. Resulta curioso que si pasamos por delante de él, en el número 7 de la calle Marqués de Riscal, no podemos verlo, ni tan siquiera imaginar que un lugar de sus características se encuentra a escasos metros de nosotros, pues queda oculto por la fachada de un edificio clásico.

Beti Jai: una joya arquitectónica rehabilitada
El espectacular aspecto del frontón Beti Jai

No olvidemos que el frontón se sitúa en una manzana del castizo barrio de Chamberí: ¿quién puede pensar que allí se ubica uno de los recintos de pelota vasca más espectaculares de España? Pero hay que decir que si el frontón es espectacular, no lo es menos su rehabilitación, pues para que pudiera acondicionarse hubo que realizar un concienzudo trabajo de restauración. Hoy el Beti Jai es el protagonista de nuestra sección Rehabilitar es Habitar, que habíamos dejado tras visitar la Fundación Francisco Giner de los Ríos. ¿Estás preparado para ver un impresionante frontón de pelota vasca en el centro de Madrid?

Beti Jai: una joya arquitectónica rehabilitada
El frontón queda oculto por una fachada que nada hace imaginar lo que se oculta en su interior

UN POCO DE HISTORIA: LAS MIL VIDAS DEL BETI JAI

El frontón Beti Jai fue terminado por el arquitecto Joaquín Rucoba en 1894. Entonces el presupuesto que se destinó para su edificación fue de medio millón de pesetas. El frontón tenía una superficie de 10.800 m2, con una cancha de 67×29 m2, lo cual la convertía en una de las más grandes de España. Disponía de capacidad para 4.000 espectadores repartidos en una grada de cuatro plantas. Arquitectónicamente hablando el local es una maravilla, pues se usaron columnas y vigas de hierro forjado para construirlo, además de una espectacular cubierta de madera. Llama la atención su planta semi-elíptica y su mezcla de estilos, especialmente en su fachada principal.

Beti Jai: una joya arquitectónica rehabilitada
El frontón durante un partido en 1918

En su momento fue uno de los templos deportivos de la capital, y en él se daba cita buena parte de la aristocracia madrileña. Pero fue en el año 1919 cuando la popularidad del frontón comenzó a decaer, pues entonces se prohibieron las apuestas deportivas, lo cual originó que se fuera reduciendo su público. El Beti Jai terminó cerrando sus puertas y sufrió un largo proceso de abandono. Cabe destacar que durante la Guerra Civil fue reconvertido en una comisaría y durante el franquismo se usó como local de ensayo para las bandas municipales falangistas. Ya a mediados del siglo XX fue comprado por la compañía Citroën, que lo usó para reparar sus automóviles. Fue en el año 1997 cuando lo compró la sociedad Frontón Jai Alai, hasta que en el año 2015 lo compró definitivamente el Ayuntamiento de Madrid.

Beti Jai: una joya arquitectónica rehabilitada
Elementos neo-mudéjar del frontón antes de su rehabilitación

UN DURO TRABAJO DE REHABILITACIÓN

Para que el frontón tuviera el deslumbrante aspecto que hoy tiene, ha sido necesario una rehabilitación concienzuda. Aparte del trabajo físico que supuso, se tuvo que recurrir a periódicos antiguos y fondos documentales para poder recuperar los elementos que estaban extraviados o deteriorados.

Beti Jai: una joya arquitectónica rehabilitada
Vista aérea del Beti Jai en 2010, con sus gradas semi-elípticas abiertas al exterior

Uno de los trabajos más exigentes fue rehabilitar la cubierta superior de madera, que estaba soportada por vigas metálicas y protegida por cinc. El agua deterioró mucho esta cubierta, pues el frontón es completamente abierto, y las planchas de plomo que había en la estructura cedieron. Esto provocó que el agua entrase en los forjados y hubo que reponerlos.

Beti Jai: una joya arquitectónica rehabilitada
Gradas tras iniciarse el proceso de rehabilitación

Además, en la fachada del cuerpo principal se recuperaron uno por uno los ladrillos de aspecto neo mudéjar, así como el arco principal. Por otro lado, se restauraron las tejas que cubrían el edificio: a partir de fotografías originales fueron encargadas a una empresa, que las reprodujo exactamente igual. Asimismo, se reforzó la cimentación del edificio. Cabe destacar que en 1991 el recinto fue declarado monumento nacional y en 2011 Bien de Interés Cultural.

Beti Jai: una joya arquitectónica rehabilitada
El frontón antes de ser rehabilitado
Beti Jai: una joya arquitectónica rehabilitada
El Beti Jai rehabilitado

¿SABÍAS QUÉ…?

En el Siglo XIX la afición que había en Madrid a la pelota vasca era tal que existían en la capital hasta 30 espacios diferentes en los que se podía practicar este deporte. Hoy en día sólo queda el Beti Jai.

Imagen 01: Isabel Hortal

Imégenes 02, 06 y 08: Diario de Madrid

Imagen 03, 04, 05 y 07: Igor González Martín

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