Una vivienda pasiva tiene un consumo energético muy bajo y su impacto en el medioambiente es mínimo comparado con el de una casa tradicional. Estos edificios, también conocidos como passivhouse, empiezan a verse ahora en España, y podrían definirse como edificios construidos pensando en el medioambiente. Cuando decíamos en este blog que la vivienda es mucho mejor sostenible, ya hablábamos de que nuestro sistema inmobiliario debe adquirir un compromiso con la sostenibilidad. Parece evidente que la vivienda del futuro será sostenible y que no existe otro escenario posible que el de un sistema inmobiliario que respete el medioambiente y se articule en torno a la sostenibilidad. Ya se están construyendo inmuebles de última generación en nuestro país que tendrán un consumo energético que será un 75% inferior respecto al de las casas tradicionales. Además del ahorro económico que esto supone para el propietario del inmueble, hay que pensar que estas viviendas pasivas reducen notablemente la emisión de gases de efecto invernadero, lo cual implica un gran respiro para el planeta. Veámoslo más en detalle.

CINCO CARACTERÍSTICAS DE UNA CASA PASIVA

Las viviendas que tienen el sello passivhouse cuentan con una tecnología desarrollada en Europa que certifica un consumo energético muy bajo. Se trata de un tipo de arquitectura que aprovecha al máximo los materiales de construcción (que deben ser óptimos siempre) y persigue que la vivienda tenga un impacto medioambiental mínimo. Entre las principales características de la vivienda pasiva podemos citar:

01. Gran aislamiento térmico para reducir al máximo las pérdidas de temperatura en la casa (los puentes térmicos pueden reducirse hasta diez veces en una casa pasiva).

02. Ventanas y puertas de gran calidad para minimizar las pérdidas de temperatura.

03. Ventilación controlada para renovar el aire de la vivienda con frecuencia.

04. Máxima protección solar para evitar que la temperatura de la casa aumente en épocas de calor.

05. Estanqueidad del aire para impedir infiltraciones de aire y corrientes indeseadas en la casa.

PERO, ¿CUÁNTO CUESTA UNA CASA PASIVA?

Es la pregunta que muchos se hacen: ¿cuánto me gastaré si invierto en una casa pasiva? Se calcula que una casa pasiva resulta un 15% más cara que una casa convencional. Pero hay que tener en cuenta una cosa muy importante: el coste de una casa pasiva se va reduciendo con el paso de los años, pues gracias al ahorro energético que tiene (el gasto en calefacción puede suponer un 90% de ahorro) se consigue amortizar la inversión aproximadamente en diez años. No hay que olvidarse de que los controles para que una casa obtenga el sello passivhouse son muy rigurosos, por lo que, si una casa está acreditada como casa pasiva tiene una garantía de ahorro, tanto energético como económico.