El inversor de vivienda en España rastrea el mercado residencial para comprar en localidades que no sean nuestras dos grandes ciudades, Madrid y Barcelona. ¿Cuáles son esas localidades? La Costa del Sol se ha convertido en una de las zonas preferidas por el comprador de vivienda, con Málaga a la cabeza. Precisamente la semana pasada hablábamos de lo que cuesta alquilar un piso en nuestras zonas de playa y citábamos Málaga como uno de los destinos playeros más demandados y más costosos. También hace unos meses dijimos en este blog que Málaga es un destino referencial del lujo inmobiliario español. Ahora mismo la capital malagueña es uno de los destinos más solicitados de nuestro mercado residencial, pero además hay otras ciudades como Valencia, Bilbao, Palma de Mallorca, Sevilla o Alicante donde existe una alta demanda y hay un mercado residencial bastante activo.
TRES FACTORES DETERMINANTES
Los expertos en materia inmobiliaria coinciden en señalar tres factores que son determinantes para que una localidad interese como destino residencial: que esté bien comunicada, que cuente con buenos servicios y que permita una buena calidad de vida a sus residentes. El inversor de vivienda en España busca que se cumplan estos tres requisitos, y en este sentido podemos decir que cualquiera de las ciudades que hemos citado anteriormente son buenos ejemplos de lo que el inversor quiere. Una localidad que cumple a la perfección con estos tres condicionantes es Valencia, de ahí que esté creciendo notablemente como destino preferido en nuestro mercado residencial. Los problemas derivados de los desarrollos urbanísticos que fueron paralizados años atrás hicieron que la Comunidad Valenciana se resintiera, pero poco a poco vuelve a emerger con fuerza en nuestro mercado residencial, lo cual está originando una subida de precios en las promociones inmobiliarias valencianas. Por ello, los expertos coinciden en señalar Valencia como una de las ciudades más emergentes de nuestro mercado residencial.
NUEVAS FÓRMULAS DE NEGOCIO
Si hablamos del mercado residencial actual, hay que citar las nuevas fórmulas de negocio que se empiezan a imponer en nuestro país. En este blog ya hablamos en su día del build-to-rent, una técnica inmobiliaria consistente en construir viviendas para rentabilizarlas a través del alquiler y que está funcionando muy bien en ciudades como Madrid, Barcelona, Málaga o Valencia. Hoy también es necesario hablar del flex living, esto es: la creación de viviendas con espacios multifuncionales que permiten ser adaptados para lo que el inquilino desea. De esta forma, se crean apartamentos con paredes que pueden moverse para disponer de espacios de recreo o de trabajo a gusto del inquilino. En realidad no es más que una optimización inteligente del espacio para poder usarlo a voluntad de su propietario. Ciudades como Madrid, Barcelona y Málaga son las que más invierten en este tipo de negocio que ya lleva un tiempo establecido en otras zonas de Europa pero que en nuestro país todavía es incipiente. Además, lugares como Baleares o Canarias también empiezan a ser considerados por empresas que trabajan el flex living y que ven en las islas una interesante oportunidad de negocio. Generalmente, las propiedades que más se aprovechan para el flex living son apartamentos con mobiliario adaptable, espacios de coworking o viviendas pensadas para que sean compartidas entre múltiples residentes.
Imagen 01: Olivier Ortelpa
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