En pleno corazón del barrio de La Latina, el Mercado de la Cebada se distingue por ser uno de los más auténticos, alegres y castizos de Madrid. Sus orígenes se remontan al siglo XVI, pero actualmente el mercado sigue muy vivo y muy vigente, con una imagen fresca y renovada que ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos. Sólo ya el arte que decora su fachada y sus puestos interiores dice mucho del carácter cosmopolita y moderno que ha sabido adoptar este mercado, situado enfrente del mítico Teatro La Latina. El Monasterio de las Descalzas Reales fue nuestra última parada en un Lugar con Mucha Historia; hoy viajamos al Mercado de la Cebada para seguir conociendo la Historia de Madrid.
EVOLUCIÓN DEL MERCADO
La Plaza de la Cebada da origen al nombre de este mercado, que desde el Siglo XVI se establecía en la propia plaza a través de particulares que montaban sus puestos formando un tradicional mercado de abastos.
Fue en el año 1875 cuando se decidió construir la estructura de un mercado (realizada en hierro), que fue diseñada por el arquitecto Mariano Calvo y Pereira. Entonces el Mercado de la Cebada se establece en Madrid como un lugar con edificio propio, y así se mantuvo hasta el año 1956. Fue uno de los mercados más importantes y transitados de Madrid, pero se fue deteriorando con el uso y en 1956 tuvo que ser derribado debido a su precario estado. Sólo dos años después, en 1958, ya estaba construido un nuevo edificio, donde el hormigón sustituía al hierro como principal elemento de construcción.
UN ASPECTO RENOVADO
Sin embargo, los tiempos cambiaban y también lo hacían los hábitos de consumo de los madrileños, lo que llevó en el siglo XXI a replantear si el espacio que ocupaba el mercado era necesario para lo que ofertaba.
Se llegó incluso a pensar en un nuevo derribo, hasta que en 2009 la Junta de Madrid decide finalmente mantener el edificio y acondicionarlo a los nuevos tiempos. En total son 6.000 los m2 de los que dispone el mercado actualmente, repartidos en dos plantas.
Existen dos plantas más que hacen los servicios de almacén y aparcamiento. Además del alegre ambiente del mercado y de sus buenos productos, quien lo visita puede disfrutar de un edificio interesante, con bóvedas de colores y una decoración realizada en algunas de sus zonas por artistas actuales, como ya hemos dicho. En el mercado también hay actividades culturales, conferencias y hasta algunos conciertos.
Fotografía 01: r2hox
Fotografía 02: extraída del libro “El Madrid Antiguo”
Fotografía 03: Daniel Lobo
Fotografías 04, 05 y 06: Marta Nimeva Nimeviene
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