La gran mayoría de los edificios españoles deberán rehabilitarse para poder venderse o ponerse en alquiler. Se estima que más del 80% de los edificios españoles tienen una calificación energética deficiente, lo cual sirve para hacerse una idea de la importancia que tiene la rehabilitación si queremos conseguir que la calidad medioambiental de nuestro país mejore. En este blog ya dijimos que reformar una casa es revalorizarla (se calcula que una vivienda usada aumenta su valor un 24% después de una reforma). Además, al reformar una vivienda, si lo hacemos bien, conseguiremos mejorar su sostenibilidad, algo muy importante, pues hoy en día el sistema inmobiliario tiene un compromiso firme con la sostenibilidad y el respeto al medioambiente. Por todas estas cuestiones, cualquiera que quiera poner un piso a la venta o en alquiler lo primero que deberá pensar es cuáles son las deficiencias de su inmueble y, en tal caso, poner remedio para corregirlas. Para ello, realizar una reforma resultará imprescindible en la mayoría de los casos.

HACIA LA DESCARBONIZACIÓN DE EUROPA

Tan sólo un 20% de los edificios españoles cuenta con una buena calificación energética. Esto quiere decir que la gran mayoría de nuestros edificios tiene una calificación energética insuficiente (en nuestro caso, una calificación inferior a la letra D). Esto sucede cuando los edificios no se renuevan y van quedando obsoletos en cuanto a eficiencia energética y sostenibilidad se refiere con el paso de los años. Según el Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España, en 2050 habrá en nuestro país 10 millones de viviendas para rehabilitar. Es importante tomarse en serio este tema, pues como veremos dentro de un momento, desde Europa ya se está trabajando en medidas orientadas a la sostenibilidad y la eficiencia energética que entrarán muy pronto en vigor. Se estima que el sector de la construcción provoca el 9,3% de las emisiones de gases de efecto invernadero que se producen en nuestro país; esto quiere decir que si se hacen esfuerzos mayores por parte de este sector, podemos conseguir que estas emisiones se reduzcan todavía más. El objetivo de la Unión Europea es que en el año 2030 todos los edificios (tanto los nuevos como los antiguos) tengan un nivel de eficiencia superior a E, y en el año 2033 superior a D. Esto sería la antesala a la descarbonización de Europa, que quiere conseguirse en el año 2050, circunstancia que implicaría que ningún inmueble europeo tuviera emisiones.

NUEVA DIRECTIVA DE EFICIENCIA ENERGÉTICA

Ya está aprobada la propuesta legislativa correspondiente para la Nueva Directiva de Eficiencia Energética de la Edificación en Europa, mediante la cual todos los edificios europeos que se vendan o se alquilen deberán tener un nivel de eficiencia energética superior a D (recordemos que la eficiencia energética se mide en una escala que va desde la letra A a la letra G). En los próximos meses esta directiva entrará en vigor, y todo el que quiera vender o alquilar su casa deberá cumplir con el nivel de eficiencia energética exigido. Además, la Unión Europea exigirá a todos los países miembros que tengan una tasa anual de renovación energética del 3% (actualmente en España la tasa es del 0,11%). Los edificios deberán tener mejoras de aislamiento en paredes, cubiertas y suelos, así como de ventilación, calefacción y carpintería exterior. Aquí es donde entra en juego la rehabilitación, pues resultará imprescindible realizarla para que muchos edificios cumplan con la norma.

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