Se cree que en 2023 habrá ajustes de precios en el mercado inmobiliario español, pero no serán acusados y no afectarán a zonas donde exista una alta demanda. Es el caso de Madrid, Barcelona, Málaga, Alicante, Baleares o Canarias, lugares todos ellos muy solicitados, donde apenas se espera relajación en los precios. Ésta es la conclusión a la que llegan diferentes expertos del sector inmobiliario, que además de coincidir en que habrá descensos de precios en 2023 también coinciden en que no serán reducciones significativas. Otra de las conclusiones a las que llegan es que estas reducciones se darán en zonas urbanas de poder adquisitivo más bien bajo y no afectarán a las zonas con rentas más elevadas (hay que tener en cuenta que estas últimas zonas son las más demandadas por el comprador inmobiliario, lo cual implica que en ellas los precios casi nunca desciendan). Este verano decíamos que el precio de la vivienda seguía subiendo en España; en el primer trimestre del año los precios subieron un 8,5%, lo cual supuso la mayor subida en 15 años. En la actualidad hay varios factores que provocan que nos enfrentemos a un panorama incierto: la guerra de Ucrania, el encarecimiento de las hipotecas por la subida de los tipos de interés, el temor de una posible recesión… Será importante ver cómo evolucionan los acontecimientos, en cualquier caso el Banco Central Europeo ya ha calculado un descenso de hasta un 9% en el precio de las casas para los dos próximos años por cada punto de subida de los tipos de interés. Si bien estas circunstancias podrían inquietarnos, debemos tener en cuenta que el mercado inmobiliario español ya demostró su solidez durante la pandemia, lo cual es un punto muy a su favor. También lo creen los expertos en el sector, pues para 2023 pronostican descensos poco significativos y en lugares muy concretos. Veámoslo con más detalle.
DESCENSOS DE PRECIO EN BARRIOS ALEJADOS DEL CENTRO
La mayoría de expertos en el sector inmobiliario coincide en que para ver descensos de precios en 2023 en ciudades como Madrid o Barcelona, tendremos que irnos a barrios humildes alejados del centro de la ciudad. Es el caso de Puente de Vallecas, Usera o Villaverde en Madrid, o San Martí y Nou Barris en Barcelona, por ejemplo. Allí, los descensos de precios que se produzcan serán más bien moderados, como ya hemos dicho. Pero también hay que tener en cuenta que estas zonas cada vez son más elegidas por el inversor inmobiliario, que busca comprar inmuebles en barrios asequibles de nuestras grandes urbes para rentabilizar su inversión sin tener que hacer un gran desembolso, lo cual está provocando que este tipo de barrios comiencen a ser más demandados. Sea como fuere, parece claro que los descensos de precios se producirán más bien en las zonas periféricas de las grandes ciudades, no en el centro, donde apenas hay suelo para construir y la demanda sigue siendo muy alta. Si nos centramos en comunidades autónomas, Castilla y León, Castilla La Mancha, Andalucía y Aragón podrían ser las más propicias para ver reducciones, pues es allí donde se espera que la subida de hipotecas se acuse más por parte de la población que piensa en comprar casa.
VIVIENDA, UN VALOR REFUGIO
Hace unos meses hablábamos en este blog de la revalorización de la vivienda española; entonces comentábamos el caso de la Comunidad de Madrid, donde el precio de la vivienda ha subido un 38% en la última década. El dato habla por sí solo de la solidez que tiene la vivienda en esta comunidad, si bien se trata de un caso singular, pues no hay subidas así en ningunas otras zonas. No obstante, podemos decir que esta solidez de la vivienda madrileña es extrapolable al resto de España. Y es así por la importancia que los españoles otorgan a disponer de una vivienda, que supone un auténtico valor refugio en nuestros días. Hoy por hoy el español considera que un inmueble es el activo más importante y con menos riesgo que existe, de ahí que el sector inmobiliario español haya sido capaz de sobreponerse a momentos especialmente críticos. De cara a 2023, será crucial ver cuánto durará la desaceleración económica que estamos viviendo en Europa. Algunas entidades, como es el caso de Bankinter, pronostican una caída del 3% en los precios de la vivienda en nuestro país; habrá que esperar para comprobarlo.
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